lunes, 29 de septiembre de 2008

Astrología Hermética II


Astrología Hermética parte II, El Zodíaco Interno:


Existe un axioma hermético que dice: “Como es arriba es abajo y como es abajo es arriba” La astrología gnóstica se encarga de estrechar la relación existente entre Macrocosmos y Microcosmos.

En términos estrictamente astrológicos, macrocosmos, está constituido por las doce constelaciones zodiacales y los planetas del sistema solar en relación con nuestro planeta, es decir, el firmamento (cielo) desde tiempos inmemoriales ha sido la representación y expresión de los dioses junto con sus “designios” para el destino de los humanos.

Microcosmos es la expresión de esos cuerpos celestes dentro del ser humano. Comprender esto en su hondo significado, nos permite entender cómo es que planetas y estrellas tan distantes, logran influir en el comportamiento humano en todas las áreas de la vida.

La ciencia gnóstica nos invita a hacernos concientes de la existencia de esos astros en nuestro cuerpo señalando que las doce constelaciones zodiacales se corresponden con distintas partes de nuestro cuerpo:



En la práctica podemos comprobar que una persona que nace bajo la influencia solar de un determinado signo zodiacal tiende a sufrir enfermedades relacionadas con las correspondencias corporales. Por ejemplo: Los piscianos sufren muchas molestias en los pies; los geminianos, en los pulmones; capricornianos, en las rodillas, etc.

Ante esta situación surge una “nueva” forma de enfrentar estas molestias en forma proactiva. El V.M. Samael Aun Weor en las enseñanzas plasmadas en sus obras “Curso Zodiacal” y “Tratado Esotérico de Astrología Hermética”, detalla las prácticas esotéricas para cada uno de los signos zodiacales y su influencia directa sobre las distintas partes de nuestro cuerpo. Para de esta manera lograr la integración con esas fuerzas cósmicas que nos rigen en forma “invisible”, y así actuar de forma proactiva frente a estas dolencias.